jueves, 23 de agosto de 2012

No va a ser hoy...


Me levanto, me preparo un café y me siento mirando al mar, mientras escucho ruido bajo mi ventana, un ir y venir de personas, unas acompañadas… otras solas… y me pregunto si quizás alguna de ellas se sienta como yo, llena de nada.
Y llevo ya un sinfín de minutos paralizada mirando este papel en blanco, pero llega un momento en la vida en que las palabras parecen autodestruirse antes de salir de tu cuerpo, para dejarte sin nada que decir. Sé que mis palabras se fueron con ella, dejándome vacía, añorándolas a cada momento, a mis palabras y a ella… pero sobretodo a ella: mi apoyo, mi fortaleza, mis ganas de sonreír, mi fuerza para seguir caminando sin importar la dificultad de terreno que habite bajo mis pies… mi todo.

Quizás vuelva a escribir algún día, el día que sepa que decir.



viernes, 6 de julio de 2012

Fusión

Evadirse de la realidad ... dejar que las olas te trasporten a un mundo mágico, donde nada puede alcanzarte, donde nada puede arañarte. Tan solo indagar en el aire, fundirte con su pureza y formar un universo paralelo; si, estaría bien ... pero yo quiero fundirme con el aire de este lugar y sentir que me puede alcanzar, sentir que me puede arañar, sabiendo que tal vez, solo tal vez la sensación de dolor y notar como escuece sobre mi cuerpo, me  recuerde a cada instante que sigo viva.
Y me evado en palabras de doble dirección, jugando entre lo real y lo ficticio. Me refugio en sentimientos supremos, pero desde aquí ... desde este lugar.
Hoy siento en mi cabeza una presión inalcanzable , miles de palabras acumuladas oprimen mi corazón, dejándolo casi sin respiración, debo liberarme de ellas, sólo así podré fundirme de nuevo con el aire.


Será un camino largo ... 
Pero no sueltes mi mano ... 





lunes, 16 de abril de 2012

Una carta que decía....

El 6 de septiembre del 2010 le escribí una carta a mi madre que decía:

"Madre…
Probablemente estarás sorprendida de recibir una carta mía, pero hace tanto tiempo que quiero decirte tantas cosas… que he decidido hacerlo de la única manera que puedo ser yo misma, delante de un folio en blanco dejando que sea mi corazón el que me guíe. Lo he intentado muchas otras veces, pero sólo conseguía escribir la primera línea para luego borrarla… escribía… borraba… papeles y papeles escritos de nada.
Quizás no encontraba las palabras adecuadas y tampoco sé si hoy las encontraré; pero he aprendido que todo necesita un tiempo diferente y algo en mi me dice que es el momento.
Llevo mucho tiempo con miles de contradicciones en mi cabeza y haciendo balance de mi vida y sopesando cada cosa que hago. Pienso en aquellas cosas que me hacen sonreír y pienso en ti, que eres lo más grande que tengo, lo más importante en mi vida.
Y sé que por mi carácter complicado, es difícil acceder a mi yo más sincero y eso seguramente te ha dado más de un quebradero de cabeza. También sé, que por mi personalidad, a veces puede que no esté a la altura de las circunstancias, como con lo de tu enfermedad… sé que no he estado a tu lado todo lo que necesitabas y quizás he adoptado una postura mucho más egoísta, bueno creo que egoísta no es la palabra púes sé a ciencia cierta que, sólo era miedo. Estaba aterrorizada al pensar que estuviste tan cerca de irte de mi lado, que tenía la sensación que si me acercaba demasiado te irías de mi vida. Y luego pensé, que ya que no era lo suficientemente fuerte para estar a tu lado, debía reunir el valor para ser fuerte. Así que me puse un disfraz de “Superwoman “ y construí un escudo en mi cuerpo, de esa manera tan ficticia, bloqueé con éxito todos aquellos golpes que me daba la vida. Y así… ¡nadie pudo conmigo!  Pero si me preguntas si lo he pasado mal, mi respuesta es contundente… ¡muy mal! Había días en lo que todo era horrible, por un lado en mi cabeza estabais Antía y tú a cada momento, sintiéndome culpable y por otro aquí no me dejaban ser feliz y era como… ¿Qué hago aquí, si realmente me necesitan en casa? Pero mamá, no podía rendirme, tenía que demostrarme a mi misma que podía con todo aquello y poco a poco aquellas cosas o situaciones que me destruían, me hicieron revivir y me sentí fuerte. Mi cabeza poco a poco se fue estabilizando y mi alma se fue calmando.
Aprendí a transformar lágrimas en sonrisas compartidas por mis ángeles guardianes, esos seres mágicos que cuidan de mí a cada instante en este lugar: los niños. Y mejoré a pasos agigantados en mi trabajo, recibiendo  constantemente elogios por pequeños y mayores, tendrías que escucharlos y como lo dicen… te sentirías muy orgullosa de mí, estoy segura.  Y sin duda, también mejoré como persona, ganando en paciencia, en empatía… aprendí también, a anticiparme a los sucesos, yendo un paso por delante de los demás para que me diera tiempo a coger aire. Y de todo este proceso lento de subidas de terreno rocoso con gran pendiente, de llanuras llenas de nada y de bajadas a gran velocidad por torbellinos de sentimientos, he llegado a donde ahora me encuentro… haciendo balance y me siento tranquila, porque mi cabeza está en orden y mi corazón más vivo que nunca. "

La carta sigue pero hasta aquí quiero contar... sé que ella la leía mucho, me decía que en momentos de flaqueza le daba fuerzas. Esta es la última carta que le mandé, pero no será la última vez que le escriba.

Escribiré para ti, para así poder acariciarte en cada palabra.

Siempre conmigo...






viernes, 23 de marzo de 2012

Gracias

Y llegado este momento lo único que puedo decir es GRACIAS ...

- Gracias por darme la vida.
- Gracias por educarme como lo has hecho, inculcándome valores que con el tiempo me han hecho mejor persona.
- Gracias por tu tiempo, por tu dedicación constante.
- Gracias por tu fortaleza.
- Gracias por tu comprensión y por darme siempre el tiempo que necesitaba ante cualquier situación.
- Gracias por los pequeños detalles, porque estos son los que te hacen grande.
- Gracias por enseñarme a valorar las cosas por lo que cuestan, no por lo que valen.
- Gracias por dejarme ser libre y crear en mi ganas de regresar.
- Gracias por tu sonrisa infinita.

Gracias por tantas cosas que necesitaría una vida entera para poder plasmar cada una de ellas en papel.





Y me reitero una vez más, cuando digo eso que te dije un día ...
de mayor ... yo de mayor ...

¡QUIERO SER COMO TÚ!

martes, 21 de febrero de 2012

Parece que fue ayer...

Caminando me detuve delante del escaparate de una floristería y sin querer, quedé hipnotizada observando aquellas rosas que hacían que te sintiese tan cerca.
De repente sentí el impulso descontrolado de regalártelas. Entré en la tienda ilusionada, con una gran sonrisa en mi cara, recordando a cada instante los momentos a tu lado.
Fui directa a donde estaban y acaricié con gran delicadeza uno de sus pétalos...mi cuerpo se estremeció, su suavidad me transportó por un segundo a tu piel.
Las observé durante un rato y supe que no podía decidirme por una...todas eran tan bellas! Pero algo en mi corazón hizo que mi mano no dudase al elegirlas, una sería blanca, para que entendieses que mi amor es tan sincero como puro; y a través de la de color rosa, te veía protegida con mi edredón.
Me acerque a la dependienta y le dije con energía:
- ¡Me llevaré las dos!

Me respondió con una sonrisa de complicidad y mientras las preparaba, mi corazón debatía con mi cabeza. Le preguntaba que...¿como es posible?...pero no hay respuesta.
Apenas sé nada de ti, sólo que vienes de un lugar cuyo nombre no logro entender, ni pronunciar. Pero lo que si sé es que...desde el primer día que vi, supe que eras mi alma gemela!

viernes, 20 de enero de 2012

Y sin más. . .


. . . un día te levantas, te miras al espejo y piensas:

¡Ya no más!

Ya no más atada a cadenas invisibles,
 que limitan mi vida a una superficie cercada con ficticios sistemas de seguridad.
Quiero caminar por estos senderos cubiertos de plásticos de burbuja, 
sentir como explotan bajo mis pies
 y notar como me recuerdan a cada instante que sigo viva. 
Quiero envolverme con esta brisa de frescura y lealtad,
 que recubre mi cuerpo ablandando mi escudo de acero fundido. 





jueves, 19 de enero de 2012

Conozco a una niña..


Ella es. . .¿como lo diría yo? 
¡Si! ya lo se, una niña frágilmente fuerte, que vive tras una coraza de hierro fundido, sólido y compacto, para protegerse de su amigo el miedo. Hoy me ha dejado acceder a ella. no soltaba su coraza, pero dejó que me  acercase. Se le notaba triste, perdida, sus ojos se llenaban por momentos de angustia y rabia; pero su cuerpo parecía calmado. No hablaba…alguna vez he oído que el silencio es muestra de ignorancia, sin embargo pienso que no es así.
Sus ojos…su cuerpo…su silencio…
La observé…callada yo también…y pasaron los días…los meses, los años… pero ella no articulaba palabra, yo permanecía sentada a su lado; algo me impulsaba a conocerla. Y un día de repente comenzó a hablar y yo la escuché.
Me contó que llevaba tanto tiempo encerrada tras su coraza de hierro, que ahora era incapaz de respirar sin ella pero que al mismo tiempo le ahogaba tomar aire en un sitio tan pequeño…pero tengo miedo me dijo…tengo miedo del día, de la noche…tengo miedo de la vida…pero sobretodo tengo miedo de mi miedo…
Yo no lograba entenderlo, ¿Qué cosa o cosas pudieron llevarla a sentirse tan pequeña? No le pregunté, creí que debía esperar…no quería que se escondiese de nuevo.  Mantenía la mirada fija y se calló de nuevo…supongo que sería para tomar impulso, pues a los pocos minutos continuó…y me pregunto:
¿Alguna vez has querido decir algo pero tu voz parecía inexistente, como si por mucho que lo intentases, ningún sonido saliese de tu boca? Así es como me siento a cada momento, queriendo hablar…sin poder y no se cual es la razón que me lleva a esta angustia, pero si conozco de buena mano las consecuencias que esto acarrea…unos piensas de mi que estoy ausente, que vivo en un mundo paralelo, otros que me resulta indiferente todo lo que pasa a mi alrededor, también están los que piensan que soy una persona vacía, sin nada que decir. . .y todo esto me lleva a esta situación, absurda, compleja…queriéndoles decir que lo que necesito es que mi voz vuelva a mi y gritar tan fuerte que la vuelva a perder, quizás solo de esa manera tan contradictoria. . . sólo entonces pueda volver a hablar. Mientras tanto seguiré callada. . .

Y así sin mas, esas fueron las últimas palabras de esa niña que conocí un día. . .
la niña frágilmente fuerte. . . 
la niña del silencio.

miércoles, 18 de enero de 2012

...En paz...

De vez en cuando está bien reencontrarte con aquellas cosas que te hacen sentir bien, un folio en blanco frente a la impaciencia de ser arropado. Arte transformada en melodía saliendo de dos guitarras que proceden de mi salón, acompañando al aroma de un mate que al contacto con mi boca se convierte en paz…

¿Puede haber una sensación más bonita que la de sentirse en paz? 


Ese momento, en el que piensas en todas aquellas cosas que te rodean y 
les dibujas con tus dedos una sonrisa.
Pienso en aquellos días… en los que mis sonrisas estaban truncadas por situaciones que analizadas con serenidad, resultan realmente insignificantes y pienso en cuanto tiempo he malgastado empeñándome en estar enfadada con mi mundo, en vez de utilizar esa energía para convertirlas en algo hermoso.


Tan hermoso,como la inocencia de un niño jugando con una pompa de jabón…





Pronto

Pronto volveré a transformar
sentimientos en vocablos...pronto...muy pronto... 
pero hoy cambio mis palabras 
por recuerdos plasmados en una instantánea


¡Que bonito es el frío!


Armonía



Bosque del recuerdo



La belleza también anida en las cosa insignificantes



Rozando el cielo 


Historias de raíles

La brisa en mi cuerpo


Mi hogar....